Mi suegro tiene 83 años y apenas tiene una semana, se nota el cambio. En mi casa no hay actividad, tanto mi esposa y yo salimos a trabajar todo el día y solo se quedaba con la señora del aseo, como dormía todo el día en la noche se mantenía despierto. Desde que entró a Casa Lemar como tiene actividad todo el día, cena, se baña y se duerme toda la noche, se está regularizando su reloj. Antes de traerlo investigamos varios lugares y este nos pareció la mejor opción por su precio, accesibilidad y actividades.
– Francisco Elizalde